jueves, 29 de mayo de 2008

La Reconstrucción del Imperio


Es imposible dejar de hablar sobre un tema que conmociono Asia y el mundo entero, un terremoto de 8 grados en la escala abierta de Richter que devastó la región central china. “Sichuan” fue el epicentro de tal letal sismo que tomo de sorpresa a toda la región y que termino con la vida de miles y miles de personas así como también con sus pertenencias.

Pero los terremotos no solo se produjeron una vez, sino que se siguieron repitiendo por más ocasiones en sectores aledaños al original, replicas que hasta la actualidad siguen conmocionando a la región y la siguen devastando.

Por los medios de comunicación a nivel mundial se conoce la cantidad de muertos, heridos y desaparecidos, pero es muy importante destacar las acciones que el gobierno chino junto con su población han seguido para recuperarse de tal fuerte impacto producido por la madre naturaleza, que una vez mas nos demuestra su fortaleza.

Y es que en China la televisión ha desplegado un inmenso seguimiento periodístico, por lo que quienes tenemos la oportunidad de estar en este lejano país, conocemos mas profundamente como el gobierno chino ha impulsado a su pueblo a levantarse y tomarse de la mano para aportar con la reconstrucción de la región.

Además todos los medios de comunicación se han unido para atraer el aporte económico de todos los ciudadanos. Es así que estrellas de televisión, actores, actrices, cantantes, deportistas y demás personajes se han unido a la causa de reunir recursos económicos en favor de los damnificados. Pero esta labor no solo se ha limitado a la acción televisiva o radial, y es que en lugares de trabajo, escuelas, colegios, universidades, centros deportivos y hasta en las calles de todas las ciudades de China se han recaudado fondos para ayudar a la región devastada. Y lo que mas a llenado de orgullo es ver como el ciudadano chino, sin importar edad, sexo, religión ni posición social ha aportado con lo que ha podido y así ha contribuido con la causa.

Durante tres días seguidos, el país se vistió de luto y se rindió homenaje a todos los ciudadanos chinos que murieron durante la catástrofe. Tres días en los que se tocaron sirenas y bocinas a las 12 de la tarde y donde estudiantes, trabajadores, transeúntes y conductores, es decir toda la comunidad china, se paralizo para otorgar un momento de silencio que estremeció y provocó las lagrimas a más de uno.

La bandera a media asta y la tristeza en los rostros de todas las personas fueron el marco que se vivió durante aquellos momentos en los que se conmemoró el fallecimiento de miles y miles de inocentes que encontraron su muerte en casas, lugares de trabajo y establecimientos de educación.

Las escenas más conmovedoras se vieron en las escuelas donde miles de niños murieron, y donde maestras ofrendaron sus vidas para salvar a sus alumnos. Es así como la imagen de una maestra fallecida abrazando a sus alumnos que sobrevivieron fue la imagen que rodó por toda China como una muestra de que la recuperación se debe dar en honor a quienes sobrevivieron y a quienes fallecieron por salvar la vida del prójimo.

China ha puesto todo su arsenal a disposición de la reconstrucción, la mayor tecnología, todos los recursos terrestres, aéreos y marítimos han servido para que este país transporte y reciba como donación alimentos y demás víveres que sirvan como ayuda a la comunidad. Y no se puede dejar de mencionar al interminable factor humano que ha aportado con su trabajo para contribuir con un granito de arena a la recuperación de todas las zonas destruidas y al cuidado de toda la gente que requiere atención.

La reconstrucción se esta viendo de a poco, pero aun falta mucho por lograr, sin embargo la acción colectiva de este país no descansa para conseguir el objetivo de levantarse y seguir adelante en su desarrollo. Solo el tiempo podrá enseñarnos cuan veloz y eficaz es el trabajo chino, y ese momento seguramente llegara muy pronto, por que si algo tenemos que aprender de ellos es su tenacidad en el trabajo.